Se cayó la sesión de Ficha Limpia por la ausencia de un diputado y crecen los cruces entre el PRO y La Libertad Avanza

La sesión de la Cámara de Diputados para tratar el proyecto de Ficha Limpia quedó sin quórum tras la ausencia de un legislador, lo que encendió las alarmas y provocó un intenso cruce político entre el PRO y La Libertad Avanza (LLA). Con solo 128 diputados presentes, el presidente de la sesión, Martín Menem, levantó el debate rápidamente, lo que alimentó las sospechas sobre una posible falta de interés por parte del oficialismo para avanzar con la ley.

El clima político en el Congreso ya estaba enrarecido por las tensiones en torno al Presupuesto 2024, que enfrenta críticas tanto de la oposición como de los gobernadores provinciales. Estos últimos, particularmente los del Norte Grande y el Litoral, advirtieron que podrían tomar medidas drásticas contra el gobierno de Javier Milei si no se incorporan sus demandas en el proyecto. Entre estas demandas se encuentran mayores fondos para obras públicas y beneficios específicos para sus regiones.

Gobernadores presionan a Milei con un golpe institucional

Según fuentes parlamentarias, los gobernadores estarían considerando un golpe político coordinado en ambas cámaras del Congreso. En el Senado, buscan desplazar a Bartolomé Abdala de la presidencia provisional, el segundo cargo en la línea de sucesión presidencial. En Diputados, el objetivo sería remover a Martín Menem como presidente de la Cámara Baja.

La posibilidad de un acuerdo entre el peronismo, la UCR y el PRO para arrebatarle estos cargos a LLA no es nueva. En el Senado, se menciona a Cristian Ritondo, jefe de la bancada del PRO, como un posible reemplazo de Menem en Diputados. Este movimiento contaría con el aval de Mauricio Macri, quien ve en Ritondo una figura clave para fortalecer la posición del PRO frente a las recientes críticas a la gestión de Milei.

Tensiones en torno al Presupuesto 2024

La discusión del Presupuesto 2024 también está en el centro de la crisis política. Después de que el diputado José Luis Espert cancelara una reunión clave de la comisión el martes, aumentaron las especulaciones sobre una posible prórroga de la ley de leyes vigente. Esta demora ha enfurecido a los gobernadores, quienes demandan respuestas claras del gobierno.

El conflicto no solo divide a las fuerzas provinciales, sino también a los partidos nacionales. Desde la oposición, tanto Macri como Cristina Kirchner, líderes de sus respectivas coaliciones, parecen estar aprovechando la situación para debilitar al gobierno de Milei.

Cristina, ahora presidenta del PJ, mantiene una postura dura contra el gobierno, mientras que Macri, desde el PRO, incrementa sus críticas cuanto más vulnerable parece Milei. Estas tensiones han profundizado las divisiones internas en Juntos por el Cambio y también en el oficialismo, donde algunos sectores comienzan a cuestionar la estrategia del presidente.

Ficha Limpia y un Congreso paralizado

El proyecto de Ficha Limpia, que busca impedir que personas con condenas por corrupción puedan ocupar cargos públicos, ha quedado nuevamente relegado. Este miércoles era el último día para tratar proyectos dictaminados dentro del período ordinario, según el reglamento de la Cámara Baja. Ahora, la única alternativa sería convocar a sesiones extraordinarias, una posibilidad que, aunque sugerida por Espert, parece poco probable en el contexto actual.

Un futuro incierto para la gestión Milei

Con la sesión caída y el Presupuesto en la cuerda floja, el gobierno de Javier Milei enfrenta un panorama complejo. La intransigencia para negociar con los gobernadores y las tensiones internas dentro del oficialismo podrían traducirse en un bloqueo legislativo que afectaría gravemente su capacidad de gestión.

Mientras tanto, las provincias del Norte Grande y el Litoral continúan marcando su descontento, y la posibilidad de un golpe político en el Congreso sigue latente. Todo parece indicar que la relación entre el Ejecutivo y el Legislativo atraviesa uno de sus momentos más críticos desde el inicio de esta gestión.

La pregunta que queda en el aire es: ¿podrá el gobierno de Milei sortear esta crisis o será el principio de un bloqueo institucional más profundo?